Amor cromático II

Atención: Este texto ha sido escrito mientras sonaba esta canción (pincha).

Es recomendable que no deje de ponerla mientras lee el fragmento, para así augmentar el efecto de la narración, Gracias.

Dicen, que un par de metros nunca marcan la diferencia. O al menos eso había oído, a aquellos que se atrevían a pasar centímetros cerca de mi. Aquellos que me miraban como si fuera algo único, y se pasaban horas y horas delante de mí. A todos aquellos que a pesar de haber un cartel con ''prohibido flash'', querían coger la mejor toma, sin importar que cada uno de esos flashes me estuviera destruyendo poco a poco, o me cegara el único ojo que tenía.
Allí estaban todos, cada vez venía más gente sin entender muy bien como. Y si yo no recibía la mayor atención, se la llevaba el retrato más cercano a mí, con el que yo pasaba todas las noches. Me pregunto que sentirían si supieran que es sordo, como les haría sentir. Por alguna extraña razón lo veían tal cual, la gente veía retratos, sin pensar en nada. Se fijaban en sus ojos grises, esos ojos que hablaban más de lo que hacía su boca. A veces me alivia saber que no oye lo que piensan de él. Que no oye todas esas cosas, que si tenía cara de haber ido a la guerra, que si tenía cara de no sé qué, de no sé cuantos, bla bla bla. También, había unos pocos se acostumbraban a unir óleos. Por alguna extraña razón, a mi me consideraban la hermana del cuadro que abría la exposición, aunque esa mujer estuviera difuminada, y fuera mucho más mayor que yo, que casi podría ser mi madre. 

No acostumbraba a hablar mucho al resto de cuadros, aunque si nos ponemos específicos, solo estaba con el chico de los ojos grises. No porque fuera rubia me iba a convertir en una amante de la vida, una chica estudiosa y guapa, feliz quizás. O al menos eso era lo que decían al verme. Lo de feliz no lo entendía, tampoco era para tanto, y más con media cara. Como le gustaba a la gente encasillar a los demás en simples retratos. Si eso es lo que se ve, vamos a juzgar sin conocer. Da igual que no sea así, porque total, la gente me pondrá la etiqueta que quiera. 
Y así me sentía, pero es que tampoco iba a abrir la boca a aquellos que me observaban fijamente. Solía pasarme las noches con ese chico, porque sabía con total seguridad, que no me entendía nada, y podía contarle todo lo que me ocurría. Quizás, a muchos de estos retratos solo necesitaban que les escucharan. Y él, con esos ojos tan grises, que me afirmaban que quería escucharme, aunque no pudiera. O al menos eso quería creer, quizás, después de todo, él si supiera todo lo que le estaba diciendo.
Solía hablar con él de todo un poco, pero sobre todo del cuadro de enfrente. Sobre todo de esa mirada perdida en el horizonte que tenía, y como no, un horizonte donde la única cosa que había era yo. Con esos labios de la misma tonalidad que los míos y ese azul pálido de su mirada que destacaban en un fondo medio verde o azul turquesa. Era de admirar su fondo la verdad, el autor quiso marcar distintas tonalidades, y quizás esas cosas marquen las pequeñas diferencias. Quizás sea por eso que él está allí, y yo esté aquí. Y que aunque se haga de noche, yo solo pueda decirle lo maravilloso que me parece él, al chico de los ojos grises. Me parecía tan perfecto teniendo solo un ojo, que no me imaginaría ver ese cuadro teniendo dos. 

Me pregunto si alguna vez crucé por sus pensamientos. A  mi me pasa todo el tiempo.

Elije un final para acabar la historia:

Final(pincha)   ¿Final feliz?(pincha)  Final alternativo (Pincha)

Pintor: Harding Meyer

La historia no tiene nada que ver con el pintor, solo las imágenes que se pueden ver en ella.

Para ver más pinturas: Harding Meyer (pincha)  Harding Meyer tumblr (pincha)

¡Querida familia! Siento el retraso, para variar. Sé que dije que sería pronto, pero como veis ni siquiera he podido pasarme aún por vuestros blogs. Los que sabéis mi situación personal podréis entenderlo, para los que no, espero que seáis comprensivos. Lamento muchísimo no poder publicar tanto, ni pasarme por vuestros blogs. Es por ese motivo, y por causas personales, por lo que no volveré a subir una entrada hasta finales de febrero, principios marzo. 

Como ya he dicho son motivos personales, y os intentaré leer en cuanto pueda. Sé que os debo una ronda a todos por vuestros blogs, no me lo tengáis en cuenta. 

Por otro lado, he decidido hacer un triple final, ya que en realidad quería hacer una entrada con distintos caminos, pero como me suponía demasiado trabajo y no he tenido mucho tiempo libre, de ahí a tener que hacer 3 partes haya tardado tanto en subirla, por lo que si os gusta la idea veré si puedo hacer más cosas así o se me ocurre alguna que otra idea. 

Muchas gracias a todos los que a pesar de todo siguen aquí, y me apoyan. Gracias por ser comprensivos y tener paciencia. Os lo devolveré.

Se os quiere y esas cosas.