16/3/11

Ese juguete...

Supongo que ya sé que pasa, después de pensarlo horas, días, semanas, ya sé que ha ocurrido. Creo que para ti soy como ese muñeco o ese coche teledirigido que te regalaban por reyes, ese día estás totalmente impaciente por abrirlo, por descubrirlo, por jugar con él, por disfrutar al máximo, y te pasas el día entero detrás de él hasta que te obligan a apagarlo, pero cuando pasa un tiempo, con ese coche o con ese muñeco ya has jugado todo lo que querías, ya has descubierto si tiene algún error de fábrica, ya lo has sacado al parque, y te aburre, te aburre jugar con ellos, así que los dejas en lo alto de la estantería mientras coges otro juguete con el que entretenerte.
Pero el tonto del muñeco, ingenuo, está quieto en lo alto de la estantería, esperando día a día que le vuelvas a coger, que vuelvas a jugar con el, pero cada vez pierde más las esperanzas.
De todas maneras llegará el día en que el muñeco esté roto y cansado de esperar, y sé que entonces te volverá a apetecer jugar con él, pero cuando vayas a la estantería a cogerlo descubrirás, que a él ya se lo han llevado y que está en otro sitio pasándoselo mejor antes.

0 comentarios:

Publicar un comentario